martes, 25 de junio de 2013

Una estrella fugaz

No diste tiempo a presentarte cuando ya habías conseguido una familia.
No diste tiempo a presentar a tu familia cuando ya nos has dejado.

Monito, Gizmo, Nano, Winter... Has tenido tantos nombres como madres. Pero hay veces que el cuerpo no aguanta ni siendo tan querido como has sido tú.

Winter, que así te llamabas oficialmente, nos has dejado esta noche y esta mañana ha empezado el día de muchos de nosotros con esta triste noticia. Creo que nadie se lo cree... luchaste como un campeón desde que te encontraron en la calle, corrías a lo loco por el transportín con sólo unos días de vida, superaste una neumonía con sólo 3 semanas. Y de golpe creciste, y echaste a andar levantando el culete y cayendo al suelo cada dos por tres.
Todos decíamos que te comerías el mundo habiendo superado tanto problema. Pero hay veces que nos olvidamos de que sois bebés, que sois muy frágiles y que podéis tener mil problemas sin que casi nos dé tiempo a reaccionar.
 
300 gramos de muñequito que alegró las casas de mucha gente en el último mes. Lo siento, lo sentimos todos por no haber podido hacer más.
Tus hermanos te esperan Winter, descansa bonito...


Mil gracias a David por encontrarlo e intentar darle una oportunidad en la vida, a Raquel y Ester, de la clínica Bremen, por cuidarlo de forma intensiva :-), a Cristina , Cris, Nelly y Marga por ser tan buenas madres de acogida, por vuestras horas de sueño invertidas en este peque, por intentar salvarle la vida..., y gracias a Noemí, Marc y familia por haberle dado un hogar. Siento que no haya salido como esperábamos...

martes, 4 de junio de 2013

El amor...


Estoy enamorada, es algo que tengo muy claro desde hace un tiempo; cada mañana, cada noche, cada minuto podría asegurarlo sin dudarlo un segundo.

Tengo la suerte de poder vivir esto, mucha gente no puede y otra tanta no quiere. Y lo peor es que no saben lo fácil que es. Y bonito...

Llego a casa y tengo a esos cuerpazos esperándome nerviosos, saltando... Y no! No me quieren porque les doy comida (que también), me quieren porque somos una familia: jugamos, hablamos, nos cuidamos, nos protegemos. Eso es amor, no?

Vivir con ellos es lo mejor que he hecho en mi vida. Sentarme en el sofá y en diez segundos tener a Trasto encima, a Phoebe haciéndose hueco entre él y yo, a Ewok haciendo monerías cada vez que paso por su lado, a Yosi llorando porque llevo más de 5 segundos sin hacerle caso, a Ozzy compartiendo almohada conmigo, o yo con él... Y por muy malo que sea el día ellos te lo harán olvidar y te harán reír quieras o no. ¿No es eso amor?

Porque cambiaría mi vida por la suya cuando se ponen enfermos, cuando les duele algo, cuando sienten miedo...
Porque sus ojos, los ojos más bonitos del mundo, hablan por sí solos. No nos hace falta más que una mirada para entendernos, y en casa esto en mutuo. Ellos también me entienden.
Y una sola mirada mía en un mal día ha hecho que en un minuto tuviese a 7 gatos cuidándome.

Eso es amor. Y quién no lo sepa ver, se lo pierde.